Pi'erre Bourne en Apolo 2

Aunque no lo sepas, es muy posible que ya hayas escuchado a Pi’erre Bourne.

Básicamente, el trap habría sido muy diferente (y también mucho peor, a decir verdad) de lo que hemos escuchado durante los últimos cinco años si no hubiera sido por él.

La etiqueta "Yo Pi’erre, you wanna come out here?", que actúa como puerta de entrada a muchas de las canciones que ha producido, ahora se reconoce como una garantía de durabilidad.

Sus producciones para Playboi Carti, Young Thug, Lil Uzi Vert, Juice WRLD y Trippie Redd, tan cerca de la calle como de un videojuego, han sido copiadas, copiadas y copiadas de nuevo para convertirse en un canon dentro del género, casi un género en sí mismo.

Entre tantos ritmos desechables, tantos sonidos predeterminados, Bourne ha creado una escuela y su disco duro siempre ha sido el más codiciado de la industria.

Su faceta de rey Midas del beat le hubiera bastado para ganarse una entrada en la enciclopedia del trap, o de todo el hip-hop de este siglo. Pero vivir en el estudio y estar constantemente rodeado de los mejores raperos terminó haciendo que Pi'erre Bourne quisiera firmar sus propias pistas e incluso mixtapes completos.

¿Quién hubiera imaginado que el mejor productor de su generación se convertiría también en un MC versátil e imaginativo con voz propia?