Badly Drawn Boy

"The Hour of Bewilderbeast" tiene todo lo que un clásico debe tener. Desde las emocionantes y llamativas partituras de trompa y cello, hasta el desvanecimiento del trino que cierra la preciosa "Epitaph" Es un disco destinado a ser la banda sonora del verano del 2000.

Hace cuatro años, Gough, se mudó a Manchester y conoció casualmente a un diseñador gráfico y a un Dj llamado Andy Votel. Juntos crearon su propio sello, Twisted Nerve. Después de editar dos eps, el futuro de Gough estuvo marcado por una serie de encuentros fortuitos.

El primero de ellos, llegó en Diciembre de 1997 cuando por error Mark E. Smith tomó su coche por un taxi fuera de un bar de Manchester. Smith le dijo que le llevara a casa, y Gough aceptó después de acordar que The Fall grabarían "Tumbleweed". Unos meses después BDB incluyó su tema "Nursery Rhyme" en Psyence Fiction el disco de UNKLE.

Mientras tanto, BDB fichó por XL, y, cuando, Psyence Fiction apareció unos meses después, "Nursery Rhyme" fue considerada como el tema más sobresaliente del disco. El elemento que resaltaba la belleza que desprendía el tema era la desesperada voz de Gough llorando.

La preocupación de Gough con "The One" y la trascendencia del poder del amor son capitales en "The Hour of Bewilderbeast". Este elemento de ser "ligeramente inacabado" es típico de la manera en la que Gough organiza su directo y es capital para comprender su perspectiva. En el escenario, se convierte en parte estrella del pop, parte comediante.

En sus últimos conciertos le hemos visto relacionándose con las primeras filas, comenzar a tocar una canción y cambiar de opinión, comerse un plátano, irse a dar un paseo, y también demuestra su romanticismo regalando rosas a las chicas más bonitas entre el público. Pero haga lo que haga, Gough tiene la capacidad de mantener al público siempre concentrado en su persona.