En el marco del festival Curtcircuit, este año prácticamente dedicado a artistas femeninas, actuó Joana Serrat, la cantante de Vic, teloneada por el fichaje de su propia y reciente discográfica Great Canyon Records, Marta Delmont, que presentaba su primer trabajo Landlords (Great Canyon records-2018), producido por el propio guitarrista de Joana Serrat, Berni Sanchez.

Con una cuidada estética a lo americana music, Joana escenificó las canciones de su ya larga trayectoria -cuatro discos hasta la fecha- con el aplomo que da la experiencia, una voz extraordinaria -que entusiasmó al aforo en las dos canciones en solitario del bis- y una banda solidísima con cuatro guitarras -si se incluye la propia y la slide- bajo y batería.

Un magnífico Vidal Soler a la guitarra solista y Miguel P. Kersley a la slide completaban un sonido potente y rico y una puesta en escena elegante y entregada, compenetrada y sólida, con cada elemento en su sitio, claro y preciso.

Las entradas estaban agotadas y el aforo completo y entusiasta, con lo que la artista de Vic pudo mostrarse empática y cordial, sincerarse ante un público receptivo, y hacer pasar un buen rato con sus canciones líricas y hermosas, dentro del estilo que le ha valido ser escogida Artista Destacada de la Semana en la web de Nashville Noisetrade y el semanario New Musical Express la incluye en su sección de nuevos talentos “Radar”.