Estopa arrasó en su vuelta al Palau Sant Jordi en la presentación de su séptimo disco de estudio ‘2.0’, la nueva versión del dúo de Cornellà, su mejor trabajo discográfico, con canciones rockeras con rumba como las de siempre, pero esta vez Estopa se renueva abriendo el abanico a nuevas sonoridades (ritmos electrónicos, swing, funky, rock duro, aires cubanos).

El público que llenó el Palau –se colgó el cartel de entradas agotadas- mostrando así su fidelidad, se entregó de principio a fin, para corear todas las canciones, y comprobar como con 3 meses del disco en el mercado (lanzado el pasado 21 de noviembre y con 80.000 copias vendidas hasta la fecha) sus fans ya se saben todas las letras del nuevo disco.

Con una puesta en escena con juego de luces, proyecciones en cinco columnas y un sonido espectacular con una banda de lujo, Estopa cautivó a los estoper@s de Barcelona desde el inicio del concierto con un ritmo trepidante. El sonido electrónico da paso al hard rock, “emitiendo” via twitter para todo el mundo las tres primeras canciones del concierto: ‘Mañanitas’, ‘Vino tinto’ y ‘Me quedaré’ -2º single y de las canciones más coreadas del nuevo disco-.

Se observa una evolución en la temática de sus canciones. Será que se nota el paso del tiempo, cantan en el primer single la pegadiza ‘La primavera’. El turno de rumbas 100% Estopa, genuinas y callejeras, continúan en ‘Fin de semana’, ‘Run run’ –que dedican a Rosario Flores-, ‘Ya no me acuerdo’ –con Jose a la voz solista- y ‘Rumba sin nombre’.

El primer medley de la noche nos lleva a canciones imprescindibles de discos anteriores. Es el caso de ‘Hemicraneal o ‘Partiendo la pana’. Para acercarse al funk en ‘Indecisión o no’ con el virtusiosismo de Antonio Ramos al bajo (y director musical de la gira). Y adentrarnos en un magnífico set acústico, en el que destacan ‘La bombillita’, el tema más autobiográfico dedicado al hijo de David de cuatro años. ‘Naturaleza’ (incluida como bonus track en la edición especial limitada del álbum) con la magia de la cantante de flamenco India Martínez como artista invitada, que también interpretó un fragmento de ‘Vencer al amor’, canción de su último disco ‘Trece verdades’.

Momento en el que empiezan a sonar para deleite de todo el Sant Jordi las canciones de su exitoso primer disco (más de un millón de copias vendidas), ‘Tu calorro’, ‘La raja de tu falda’ y ‘El del medio de los Chichos’, con el lucimiento a la guitarra de Juan Maya y de Angie Bao y Luis Dulzaides a la percusión.

Vuelven los Estopa más renovados con el sonido cubano de ‘Vacilón’. La única balada en ‘Un rincón de mi mundo’ con el piano magistral de Alfonso Pérez. Guitarras heavy (Ludovico Bagnone) en ‘La locura’, canción que rescatan de la primera maqueta, al igual que ‘Naturaleza’. Y muestran su lado místico y madurez en ‘Alma animal’. En esta recta final, el segundo medley es para las festivas ‘Fuente de energía’ o ‘Pastillas de freno’. Y vuelven sus primeros éxitos con ‘Me falta el aliento’, ‘Cacho a cacho’ o ‘Como Camarón’, con la que cerró el concierto.

Los hermanos Muñoz, David y Jose, se muestran terrenales en todo momento, desean que la gente pueda mantener o conseguir trabajo, y ante la asistencia masiva agradecen que se hayan gastado su dinero en una entrada. La música de Estopa nos alegra y, en estos tiempos extraños, nos invita a renovarse.