The Soul Movers es el proyecto iniciado hace dos años por Deniz Tek, guitarrista, médico, piloto de aviones y Dios sabe qué más tras la separación del mítico grupo australiano Radio Birdman. En esta nueva andadura recupera el sonido soul (tan en boga últimamente) de los 60’s y 70’s imperante en su Detroit natal, cuna de la Motown.

Con tan sólo un single (editado por el sello madrileño Munster) y un reciente LP “On The In Side”, se han embarcado en 5 fechas por la Península, actuando en domingo en la barcelonesa Sala Sidecar para un reducido público que no superaba la treintena.

The Soul Movers por su parte no se desanimaron por la escasa afluencia, y los cuatro veteranos músicos curtidos en varios grupos a lo largo de los años, impregnaron el local de soul añejo aderezado con la rockanrolera guitarra de Deniz Tek. Si a eso añadimos el sorprendente chorro de voz de la sexy vocalista Lizzie Mackenzie y su casi metro noventa, obtenemos un competente combo en directo. Así empezaron con “Fight For Love” tema no editado que se puede oir en su myspace, y con varias canciones de su LP como “Krazy Kats”, “Not With Her” o “Dead”. Lizzie capta las miradas del público mientras se golpea la pandereta en las caderas o mientras dialoga con el grupo entre temas. El repertorio se basa en medios tiempos, para el lucimiento de la vocalista y de los sobresalientes Pip Hoyle (teclados, ex-Radio Birdman) y Calvin Welch (batería).

Caen varias versiones como era previsible: “I Just Wanna Make Love To You” donde la temperatura sube por momentos y “A Natural Woman” y “Baby I Love You” de Aretha Franklin, clara influencia de Lizzie. Es curioso ver a Deniz ayudando en tareas vocales en la primera de las citadas, mientras toca este tema bluesy con su cortante y efectivo estilo a la guitarra. Completan con otros temas propios, a destacar “Low And Slow”, “Piece O’ Me” y “Man I’ve Been Waiting For”, con Lizzie hablando de sus amores, desengaños y demás.

Tras algo más de una hora de show es un placer poder intercambiar cuatro palabras con Deniz y los demás, hacerse alguna foto y esperar a que se vuelvan a acercar por aquí. Tener la suerte de asistir a un bolo de The Soul Movers es una celebración de fiesta y buena música.