Doble cartel metálico que de no haber sido así hubiera sido un rotundo fracaso, si es que se puede decir que no lo fue, ya que no creo que fuéramos ni cien personas los que asistimos. Dos históricos, Matt Sinner con su propia banda aunque más reconocido como componente de Primal Fear y un peso pesado en la historia del rock como Ross The Boss al lado de bandas imprescindibles como Dictators y Manowar no tuvieron la aceptación que se merecen. Echaremos las culpas a la cantidad de conciertos que hay en la actualidad, el haber sido en martes y el elevado precio de las entradas.

La vuelta de Sinner con un nuevo y excelente álbum “Crash & Burn” nos mostró a una banda perfectamente consolidada que debería estar más en boca de todos. Su show se basó sobretodo en los temas de su nuevo trabajo y una metalizada versión de “Rebel Yell” de Billy Idol. Destacar que a la izquierda del escenario se montó una barra de bar para los músicos y para todas las chicas que estuvieran dispuestas a subir al escenario, en el cual rezaba el cartel de “It´s ladies night!”. Sin embargo solamente fueron dos las atrevidas.

Y el momento cumbre, volver a ver a Ross The Boss, ahora con su propia banda cuando hace unas pocas semanas visitó el mismo escenario junto a Dictators. La historia de este proyecto es parecida a la de Judas Priest pero al revés. El guitarrista conoció a un grupo que hacian versiones de Manowar y colaborando con ellos le picó el gusanillo de volver a hacer metal y así se enfrascó en este proyecto junto a los músicos que le rendían tributo.

De aquí surgió “New Metal Leader” un trabajo que encantará a los seguidores de Manowar y que es más digno que lo que hacen estos en la actualidad. Lo interpretaron al completo a excepción de “May the gods be with you” y claro está, no podían olvidar a la banda culpable de todo esto y así cayeron cuatro canciones: “Gloves of metal”, “Thor”, “Hail to England” y “Hail and kill”.