Neal Schon prestigioso guitarrista fundador de la banda de AOR norteamericana Journey, decidió emprender un nuevo proyecto contando con músicos experimentados. El estaría al frente de la guitarra y desde esa base empezó su búsqueda. Contó con el batería Virgil Donati, conocido por tocar con Steve Vai, Planet X y un largo etcétera…

Aunque no muy conocido, Marco Mendoza, ha tocado como bajista en grupos tan prestigiosos de la escena hard-rockera como Whitesnake, Thin Lizzy y el excéntrico solista Ozzy Osbourne. Y finalmente contó con la voz de Jeff Scott Soto,con una carrera de 20 años a sus espaldas en la cual ha sido vocalista de Yngwie Malmsteen y Axel Rudi Pell; ha formado grupos tales como Eyes, Takara, Talisman y también ha tenido su carrera como solista apoyado por la JSS Band, con la que ya había actuado en Barcelona en los años 2003 y 2004.

Bikini está llena; el show comienza con unos escasos 15 minutos de retraso, que el público parece olvidar en cuanto los músicos salen a escena. Primer tema de la noche,” Highest Ground”, seguido de los demás temas cañeros del CD, “New Position”,”Another World”. Después toca “Soul Goes On” una de las baladas.

Todos los componentes tiene su momento de protagonismo en el show; Soto desaparece de la escena. Neal Schon empieza con un solo de guitarra seguido de la canción “Voodoo Chile” de Jimmy Hendrix y “Spanish Caravan” de The Doors ambas cantadas por él mismo. En estas dos canciones Donati hace alarde de sus dotes a la batería con un solo. Todos desaparecen de escena; reaparece Mendoza con un sombrero y su bajo; Interpreta “A Bailar To’ Mundo”, un tema instrumental que alargó hasta los 15minutos, dejando sobradamente claros sus dotes como bajista y más que agotados sus minutos de protagonismo.

Reaparece Soto al piano e interpreta un medley de baladas que hace un paréntesis en la tónica hard-rockera del concierto. Inicia el medley con “Faithfully” seguido de “Don’t Stop Believing” y “Send her Love” del grupo Journey. Hace también un flash-back a su carrera interpretando” I’ll be Waiting” de sus tiempos en Talisman y versionando “Crazy” del Seal y “Purple Rain” de Prince.

Entre canción y canción hay una buena interacción con el público que se hace más amena gracias al dominio del castellano de Mendoza y en menor medida de Soto. Vuelven con canciones del Soul Sirkus, “Periled Divide” y “Peephole” son las siguientes. Uno de los momentos más álgidos del show es “Stand Up”, canción que Soto compuso para la banda sonora de Rockstar y que lleva interpretando en directo durante todos estos años como solista.

Se da por concluido el concierto, el público se ha emocionado con la voz de Soto, con la guitarra de Neal Schon y reído con Mendoza. Donati pasa bastante desapercibido a ojos del público. Han demostrado estar en forma pese a estar entrados en años; han sabido animar al público dejando ganas de repetir ya que prometen volver en junio del próximo año.