Tras el fiasco de público de su última gira con un Sant Jordi prácticamente vacío, esta vez se vivió un mejor ambiente con un Razzmatazz hasta la bandera. Ya de entrada pudimos gozar de la gran salud que todavía derrochan Girlschool, que tuvieron el honor de abrir para uno de los mejores shows que se pueden ver en la actualidad y que en breves momentos pudimos cerciorarlo.

Las británicas arrollaron con sus clásicos de toda la vida: “C´mon let´s go”, “Screaming blue murder”, “Hit and run”…que sólo eran reconocidos por unos pocos seguidores y es que a pesar de ser la primera banda de metal femenina, siempre se les clasificó en la segunda división del heavy metal. Pero aun están ahí y en tan buena forma como en los ochenta

Alice Cooper tenía la apuesta ganada desde antes de pisar el escenario, ya que la banda que le acompaña tiene la misma fuerza que el viejo cantante. Eric Dover ya no está, pero solo la presencia de Ryan Roxie ya es sinónimo de calidad. El show sigue basándose en los viejos trucos de siempre pero con algunos cambios (aun sigue usando la guillotina, bailarinas, camisa de fuerza…) y el repertorio además de los nuevos temas como “Woman of mass distraction”, “Dirty diamonds” o “Between high school & old school” se entrelazan con clásicos como “No more Mr. Nice Guy”, “I´m eighteen”, “Welcome to my nightmare”, la aclamadísima “School´s out” y sus guiños comerciales de los ´80, “Poison “ o “Feed my Frankenstein”.