¡CANCELADO!
MUCHO
21:00h. ENTRADA: 10 euros.
"Este grupo es resultado de la necesidad -casi adicción- que tenemos de seguir en la música... Nos encanta y nos realiza personalmente seguir tocando y haciendo canciones, seguir emocionándonos cuando aparece una melodía, una letra, cuando encuentras el acorde perfecto... Esto no podía pararse..."
Eso es MUCHO. Miguel de Lucas habla en nombre de todos. Miguel es el bajista, Fausto Pérez el guitarrista, Carlos Pinto el baterista y los tres son The Sunday Drivers, de toda la vida. El cuarto mucho es Martí Perarnau -voz y guitarra- y viene de Underwater Tea Party, pero estuvo al teclado en la última gira de los de Toledo. Y esta es la única conexión que hay entre esas dos bandas y MUCHO. Porque MUCHO es... MUCHO y hay que disfrutarlo sin pensar en nada más. Comenzaron en marzo de 2010 a juntarse en el local de ensayo para hacer versiones y, dos meses después, tenían dos canciones. A partir de ahí, todo fue rodado y en octubre de ese año ya tenían las once que forman parte de su primer y homónimo disco, Mucho. Se fueron a Barcelona, a los estudios Blind Records -segunda casa de Sidonie- y allí Ricky Falkner -con la ayuda de Santos Berrocal y Floren Ferrer- se encargó de la producción. En ese momento, tanto el equipo de producción como la propia banda, escuchaban lo mismo: The Raconteurs y The Black Keys. Dos semanas y media de grabación, otras dos de mezcla y master y, en cuestión de un mes: Mucho. Un disco optimista y lleno de energía, de rock, de ganas, de ilusión, de experiencia y de sorpresas. De canciones que, sin darte cuenta, cantas en la segunda escucha. Impresiona su base rítmica y te das cuenta de quien hay detrás de cada una de las once canciones de Mucho. Martí lleva al local (de ensayo) el bruto -acordes a la acústica o al piano, con una melodía de voz, con algo de letra- y los cuatro lo dan mil vueltas hasta dar con la clave. "Es un poco construir para luego volver a reconstruirla y así crear una nueva construcción".
Por ejemplo, "Corre Mi Reloj": la original era más "country que la banda sonora de Río Bravo de John Wayne" y, al final, es una de las mejores. Comienza con una guitarra de lo más stoniana y termina en Manchester, como si fuera una canción de The Stones Roses o Kula Shaker. "Somos Más", sin embargo, fue rockanrollera desde el principio, sólo que con la ayuda del piano de Floren quedó absolutamente deslumbrante y enseña la actitud que MUCHO tiene en estos momentos. Son nuevos pero cuentan con un background impecable que queda latente de la primera a la última nota de cada uno de los once títulos de su debut. Y saben que no les van a regalar nada y que tienen que empezar de cero pero, ¿será por ganas?
Las letras son bastante... marcianas y en castellano que, para todos, era la primera vez. Martí llena páginas sobre un tema concreto, se sienta con la guitarra y va cogiendo lo que mas le gusta, de modo que, cada letra es la selección de las que quedan bien juntas. Por eso, a veces, cuesta encontrar la conexión entre ellas. Pero todas tienen un significado conceptual en su totalidad, algo parecido a lo que pasa con las de R.E.M. No queda muy claro de lo que hablan para que cada cual lo interprete a su manera: "Eso es lo bonito de la música, que el que escuche un disco pueda llevar sus propias experiencias a las canciones, si lo das todo masticado y fácil es un rollo". Y así tenemos: "Raro será que esa pija, tenga la casa en pie y conserve a alguna amiga. Uuuh, manos atrás, ¡Qué poema! ¡Qué evento espectacular! ¡Qué ojos tan atentos!" ("La Casa En Pie"); "Los niños gritan al salir que sois muy baratos. Y lo hacéis bien, se os da genial y con tus pies me humillas y se transforma en grito irreversible" ("Lo Hacéis Muy Bien"); "¡Hasta nunca, adiós! Somos la mancha de tu subdivisión. Es tan temprano¿ Resquemor en la pista, amanece muy de prisa y con tu voz¿" ("Resquemor En La Orilla"). Y luego está "¡Qué Viva Su Ley!", que habla de la primera estrella de música de la que sólo se conserva una melodía de toda su discografía¿
Mensaje complejo, en definitiva, surrealista y sesgadamente descriptivo. Un poco de misterio está bien, total, nos pasamos la vida escuchando álbumes enteros en inglés y no llegamos a comprender todo. Radio Futura tampoco lo puso fácil en ese sentido. Y muchos de los títulos o expresiones que se escuchan, en realidad, son bromas internas del grupo. "Los Hijos del Mal" -con un principio de guitarra y teclado perfecto que la convierten en uno de los singles- es cosecha de Martí. "Si Quieres, No" es una de las habituales del que fuera road manager de The Sunday Drivers, que no se sabe muy bien lo que significa pero que todo el mundo entiende cuando se pronuncia con acento muy madrile y muy chulesco.
Incluso el propio nombre de la banda, que ha tenido unas cuantas versiones. Al principio fueron Los Humos, luego Los Pérez, luego Miles y, por fin, MUCHO, algo así como la traducción de "¡bravo!" en Donosti. Lo que vamos a gritar a partir de ahora: ¡MUCHO! - Virginia Díaz
MUCHO: www.somosmucho.com
MUCHO
21:00h. ENTRADA: 10 euros.
"Este grupo es resultado de la necesidad -casi adicción- que tenemos de seguir en la música... Nos encanta y nos realiza personalmente seguir tocando y haciendo canciones, seguir emocionándonos cuando aparece una melodía, una letra, cuando encuentras el acorde perfecto... Esto no podía pararse..."
Eso es MUCHO. Miguel de Lucas habla en nombre de todos. Miguel es el bajista, Fausto Pérez el guitarrista, Carlos Pinto el baterista y los tres son The Sunday Drivers, de toda la vida. El cuarto mucho es Martí Perarnau -voz y guitarra- y viene de Underwater Tea Party, pero estuvo al teclado en la última gira de los de Toledo. Y esta es la única conexión que hay entre esas dos bandas y MUCHO. Porque MUCHO es... MUCHO y hay que disfrutarlo sin pensar en nada más. Comenzaron en marzo de 2010 a juntarse en el local de ensayo para hacer versiones y, dos meses después, tenían dos canciones. A partir de ahí, todo fue rodado y en octubre de ese año ya tenían las once que forman parte de su primer y homónimo disco, Mucho. Se fueron a Barcelona, a los estudios Blind Records -segunda casa de Sidonie- y allí Ricky Falkner -con la ayuda de Santos Berrocal y Floren Ferrer- se encargó de la producción. En ese momento, tanto el equipo de producción como la propia banda, escuchaban lo mismo: The Raconteurs y The Black Keys. Dos semanas y media de grabación, otras dos de mezcla y master y, en cuestión de un mes: Mucho. Un disco optimista y lleno de energía, de rock, de ganas, de ilusión, de experiencia y de sorpresas. De canciones que, sin darte cuenta, cantas en la segunda escucha. Impresiona su base rítmica y te das cuenta de quien hay detrás de cada una de las once canciones de Mucho. Martí lleva al local (de ensayo) el bruto -acordes a la acústica o al piano, con una melodía de voz, con algo de letra- y los cuatro lo dan mil vueltas hasta dar con la clave. "Es un poco construir para luego volver a reconstruirla y así crear una nueva construcción".
Por ejemplo, "Corre Mi Reloj": la original era más "country que la banda sonora de Río Bravo de John Wayne" y, al final, es una de las mejores. Comienza con una guitarra de lo más stoniana y termina en Manchester, como si fuera una canción de The Stones Roses o Kula Shaker. "Somos Más", sin embargo, fue rockanrollera desde el principio, sólo que con la ayuda del piano de Floren quedó absolutamente deslumbrante y enseña la actitud que MUCHO tiene en estos momentos. Son nuevos pero cuentan con un background impecable que queda latente de la primera a la última nota de cada uno de los once títulos de su debut. Y saben que no les van a regalar nada y que tienen que empezar de cero pero, ¿será por ganas?
Las letras son bastante... marcianas y en castellano que, para todos, era la primera vez. Martí llena páginas sobre un tema concreto, se sienta con la guitarra y va cogiendo lo que mas le gusta, de modo que, cada letra es la selección de las que quedan bien juntas. Por eso, a veces, cuesta encontrar la conexión entre ellas. Pero todas tienen un significado conceptual en su totalidad, algo parecido a lo que pasa con las de R.E.M. No queda muy claro de lo que hablan para que cada cual lo interprete a su manera: "Eso es lo bonito de la música, que el que escuche un disco pueda llevar sus propias experiencias a las canciones, si lo das todo masticado y fácil es un rollo". Y así tenemos: "Raro será que esa pija, tenga la casa en pie y conserve a alguna amiga. Uuuh, manos atrás, ¡Qué poema! ¡Qué evento espectacular! ¡Qué ojos tan atentos!" ("La Casa En Pie"); "Los niños gritan al salir que sois muy baratos. Y lo hacéis bien, se os da genial y con tus pies me humillas y se transforma en grito irreversible" ("Lo Hacéis Muy Bien"); "¡Hasta nunca, adiós! Somos la mancha de tu subdivisión. Es tan temprano¿ Resquemor en la pista, amanece muy de prisa y con tu voz¿" ("Resquemor En La Orilla"). Y luego está "¡Qué Viva Su Ley!", que habla de la primera estrella de música de la que sólo se conserva una melodía de toda su discografía¿
Mensaje complejo, en definitiva, surrealista y sesgadamente descriptivo. Un poco de misterio está bien, total, nos pasamos la vida escuchando álbumes enteros en inglés y no llegamos a comprender todo. Radio Futura tampoco lo puso fácil en ese sentido. Y muchos de los títulos o expresiones que se escuchan, en realidad, son bromas internas del grupo. "Los Hijos del Mal" -con un principio de guitarra y teclado perfecto que la convierten en uno de los singles- es cosecha de Martí. "Si Quieres, No" es una de las habituales del que fuera road manager de The Sunday Drivers, que no se sabe muy bien lo que significa pero que todo el mundo entiende cuando se pronuncia con acento muy madrile y muy chulesco.
Incluso el propio nombre de la banda, que ha tenido unas cuantas versiones. Al principio fueron Los Humos, luego Los Pérez, luego Miles y, por fin, MUCHO, algo así como la traducción de "¡bravo!" en Donosti. Lo que vamos a gritar a partir de ahora: ¡MUCHO! - Virginia Díaz
MUCHO: www.somosmucho.com
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