ELVIS PERKINS IN DEARLAND
+ DAWN LANDES
20:00h. ENTRADA: 22 euros. Anticipadas: 17 euros.
En una tradicional procesión de funeral de Nueva Orleans, “la segunda línea” se refiere a un conjunto de músicos de metal que van detrás de los enlutados, inyectando un espíritu de celebración espontánea en un asunto tétrico. De hecho, Elvis Perkins in Dearland es un álbum que en gran parte actúa como “la segunda línea” respecto al exquisitamente melancólico y aclamado debut Ash Wednesday. El nuevo disco está, de nuevo, lleno de momentos íntimos y confesionales, pero a Elvis se ha unido ahora un talentoso trío que ya había girado con él. Junto a Elvis a la guitarra y su cálida voz impregnada de Soul, Elvis Perkins in Dearland lo completan Brigham Brough (bajo, saxofón, voces), Boylan-Garnett (órgano, guitarra, armonio, trombón y voces) y Nick Kinsey (batería, percusión, banjo, clarinete y voces). Muchas de las nuevas canciones surgieron en la carretera de la mano de los cuatro componentes, cuya natural conexión les permitió experimentar constantemente con arreglos al vuelo, instintivamente. Pero en realidad el éxito del álbum está en la unión de esta rica amalgama de joven Rock and Roll, Folk y Gospel con la dulce intimidad de la voz de Elvis. Puedes casi saborear el sudor del escenario, sentir el pulso de la tuba en tus rodillas, escuchar la calmada respiración de Elvis en tu oído. De completo, ronco y profundo, Elvis Perkins in Dearland conjura la mayor celebración y el más triste funeral, sirviendo como fuente de sabiduría eternamente joven que profundiza con cada nuevo oyente.
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20:00h. ENTRADA: 22 euros. Anticipadas: 17 euros.
En una tradicional procesión de funeral de Nueva Orleans, “la segunda línea” se refiere a un conjunto de músicos de metal que van detrás de los enlutados, inyectando un espíritu de celebración espontánea en un asunto tétrico. De hecho, Elvis Perkins in Dearland es un álbum que en gran parte actúa como “la segunda línea” respecto al exquisitamente melancólico y aclamado debut Ash Wednesday. El nuevo disco está, de nuevo, lleno de momentos íntimos y confesionales, pero a Elvis se ha unido ahora un talentoso trío que ya había girado con él. Junto a Elvis a la guitarra y su cálida voz impregnada de Soul, Elvis Perkins in Dearland lo completan Brigham Brough (bajo, saxofón, voces), Boylan-Garnett (órgano, guitarra, armonio, trombón y voces) y Nick Kinsey (batería, percusión, banjo, clarinete y voces). Muchas de las nuevas canciones surgieron en la carretera de la mano de los cuatro componentes, cuya natural conexión les permitió experimentar constantemente con arreglos al vuelo, instintivamente. Pero en realidad el éxito del álbum está en la unión de esta rica amalgama de joven Rock and Roll, Folk y Gospel con la dulce intimidad de la voz de Elvis. Puedes casi saborear el sudor del escenario, sentir el pulso de la tuba en tus rodillas, escuchar la calmada respiración de Elvis en tu oído. De completo, ronco y profundo, Elvis Perkins in Dearland conjura la mayor celebración y el más triste funeral, sirviendo como fuente de sabiduría eternamente joven que profundiza con cada nuevo oyente.
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