JOHNNY WINTER
& BAND
20:30h. ENTRADA: 35 euros. Anticipadas: 30 euros.
Puntos de venta: codetickets
www.funhouseproductions.eu
No hace falta presentación para el músico tejano. Su nombre ha entrado por derecho propio en la anales de la música del diablo. A los once años se colgó su primera guitarra, a los catorce formó, junto a su hermano Edgar, su primera banda y a los dieciocho dejó boquiabierto a B. B. King con sus habilidades. Poco tiempo después ya llenaba grandes recintos y era uno de los tótems del blues rock durante la mejor etapa del género, los años 70. Pero todo pasa factura. La heroína y el alcohol casi acaban con su carrera y con su vida. Reaparece con fuerza, Still Alive And Well es el explícito título de su disco de retorno, y poco a poco reorienta su manera de interpretar el blues. Se aleja de la facción más dura que tanto éxito había tenido en esa década para volver a donde empezó, a las raíces. Produce álbumes de Muddy Waters, consiguiendo varios Grammys por ellos, y a principios de las ochenta ficha por Alligator Records el sello más representativo del blues moderno. Waters dijo de él que era el mejor guitarrista blanco que había escuchado, el que mejor había sabido entender las bases primigenias del estilo y que era un verdadero bluesman. Y a Muddy no se le discute. Johnny Winter sigue manteniendo el toque mágico, el mojo, el sentimiento y la pasión por la música. Cuando sube al escenario y enchufa su guitarra la historia del blues fluye de sus seis cuerdas de manera sublime.
20:30h. ENTRADA: 35 euros. Anticipadas: 30 euros.
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No hace falta presentación para el músico tejano. Su nombre ha entrado por derecho propio en la anales de la música del diablo. A los once años se colgó su primera guitarra, a los catorce formó, junto a su hermano Edgar, su primera banda y a los dieciocho dejó boquiabierto a B. B. King con sus habilidades. Poco tiempo después ya llenaba grandes recintos y era uno de los tótems del blues rock durante la mejor etapa del género, los años 70. Pero todo pasa factura. La heroína y el alcohol casi acaban con su carrera y con su vida. Reaparece con fuerza, Still Alive And Well es el explícito título de su disco de retorno, y poco a poco reorienta su manera de interpretar el blues. Se aleja de la facción más dura que tanto éxito había tenido en esa década para volver a donde empezó, a las raíces. Produce álbumes de Muddy Waters, consiguiendo varios Grammys por ellos, y a principios de las ochenta ficha por Alligator Records el sello más representativo del blues moderno. Waters dijo de él que era el mejor guitarrista blanco que había escuchado, el que mejor había sabido entender las bases primigenias del estilo y que era un verdadero bluesman. Y a Muddy no se le discute. Johnny Winter sigue manteniendo el toque mágico, el mojo, el sentimiento y la pasión por la música. Cuando sube al escenario y enchufa su guitarra la historia del blues fluye de sus seis cuerdas de manera sublime.
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