SHOUT OUT LOUDS
+ BELAKO
20:00h. ENTRADA: 25 euros. Anticipadas: 20 euros.
Puntos de venta: codetickets, ticketmaster
Shout Out Louds: shoutoutlouds.com
Se formaron a principios de siglo en Estocolmo, a partir de amistades de infancia alargadas en el tiempo. Su primer single salió en 2003, igual que el primer EP. En 2005 le tocó el turno al larga duración de debut, Howl Howl Gaff Gaff. A esas alturas giraban ya internacionalmente y se les aclamaba en su país natal. La descarga de energía, las canciones que dan alas, el sonido ultramelódico, todos sus rasgos estaban ahí desde el principio. La fuente, el pop de los 60, filtrado, eso sí, por el indie de los 80 y los 90, pero sin perder el entusiasmo del original. Que ese LP inicial fuera un candidato en muchos lugares a mejor disco del año aparecido de la nada no fue casualidad. Luego han caído tres más, el último de ellos Optica, este febrero. Como viene siendo normal habitual en el grupo desde su segundo trabajo, se ha refrescado ligeramente el calor de su debut, haciendo que lo que parecía casi una salvaje desesperación mantenga ahora la carga emocional pero gane en mesura. El resultado los consolida entre el podio del indie-pop europeo, inspirados en esa lección que tan bien han aprendido de The Cure: lograr que hasta sus canciones más felices transmitan acertados pespuntes de melancolía interior.
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20:00h. ENTRADA: 25 euros. Anticipadas: 20 euros.
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Se formaron a principios de siglo en Estocolmo, a partir de amistades de infancia alargadas en el tiempo. Su primer single salió en 2003, igual que el primer EP. En 2005 le tocó el turno al larga duración de debut, Howl Howl Gaff Gaff. A esas alturas giraban ya internacionalmente y se les aclamaba en su país natal. La descarga de energía, las canciones que dan alas, el sonido ultramelódico, todos sus rasgos estaban ahí desde el principio. La fuente, el pop de los 60, filtrado, eso sí, por el indie de los 80 y los 90, pero sin perder el entusiasmo del original. Que ese LP inicial fuera un candidato en muchos lugares a mejor disco del año aparecido de la nada no fue casualidad. Luego han caído tres más, el último de ellos Optica, este febrero. Como viene siendo normal habitual en el grupo desde su segundo trabajo, se ha refrescado ligeramente el calor de su debut, haciendo que lo que parecía casi una salvaje desesperación mantenga ahora la carga emocional pero gane en mesura. El resultado los consolida entre el podio del indie-pop europeo, inspirados en esa lección que tan bien han aprendido de The Cure: lograr que hasta sus canciones más felices transmitan acertados pespuntes de melancolía interior.
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